martes, 13 de julio de 2010

El Agua Alcalina y La Artritis

La artritis es una enfermedad producida por la alteración patológica del cartílago -uno de los tejidos que forman las articulaciones-, lo que provoca dolor e hinchazón en las articulaciones que, con el paso del tiempo, pueden llegar a lesionarse gravemente provocando artrosis, es decir, deformaciones de los huesos.

La Medicina las divide en diversos "tipos" aunque las dos más comunes son la Osteoartritis y la Artritis Reumatoidea.
La primera es el tipo más común y suele aparecer con la edad -después de los 45 años- afectando especialmente a dedos, rodillas y caderas. La Artritis Reumatoidea, en cambio, se achaca a un mal funcionamiento del sistema inmune y afecta más a menudo a las manos y los pies. También se cree que puede llevar a la gota, el lupus y la hepatitis viral.

Lo más grave, en cualquier caso, es que en realidad oficialmente se desconoce la causa y no existe medicamento alguno para curarla,  y el futuro de quienes padecen esta "enfermedad" es sufrirla de por vida consumiendo constantemente antiinflamatorios, analgésicos y otros paliativos peligrosos que engorden las cuentas de la industria farmacéutica y terminan matando a la persona.

Para Batmanghelidj, sin embargo, los millones de personas de todo el mundo que sufren alguna forma de artritis deberían saber que el problema suele estar causado también por una deshidratación crónica.

Según él, los dolores en las articulaciones deberían de hecho considerarse meros indicadores de falta de agua en la superficie del cartílago de la articulación afectada. Es decir, el dolor artrítico no sería más que otra señal de deshidratación y acidez en el organismo.

La superficie del cartílago de los huesos debe contener mucha agua para lubricar las articulaciones y permitir que las dos superficies opuestas resbalen libremente entre sí durante el movimiento. Lo que permite a un cartílago bien hidratado que el deterioro a causa de la fricción sea mínimo.´

Por tanto, cuando no hay suficiente agua y las articulaciones no están bien hidratadas, obviamente la lubricación no es la adecuada... las superficies rozan entre sí y la acidez actúa provocando el llamado dolor artrítico.

Consecuentemente debería bastar con incrementar la ingesta regular de agua liviana para producir una mayor cantidad de sangre circulante en la zona que prehidrate plenamente el cartílago y combata la acidez.. Si esa agua es alcalinizada los resultados no se harán esperar porque, aparte de no contener ácidos, limpia eficazmente el organismo de los elementos ácidos tóxicos causantes seguros de la artritis.





Suscribete a AGUA ALCALINA por Mail AQUI

No hay comentarios:

Publicar un comentario